Uno de los síntomas más característicos del bruxismo es apretar los dientes, unos contra otros, con mucha fuerza, deslizándolos o frotándolos de atrás hacia adelante.

Uno de los síntomas más característicos del bruxismo es apretar los dientes, unos contra otros, con mucha fuerza, deslizándolos o frotándolos de atrás hacia adelante.